Personajes Ilustres del Estado Cojedes Venezuela


Personajes Ilustres del Estado Cojedes Venezuela

General de Brigada Manuel Manrique

Ilustre Prócer de la Independencia Suramericana (militar y Héroe de la Batalla Naval del Lago de Maracaibo). Nació en San Carlos, Estado Cojedes, el 26 de abril de 1793. Sus padres fueron Juan Miguel Manrique de La Sierra y María de Jesús Villegas y Salazar, descendiente del Capitán Juan de Villegas, fundador de Barquisimeto.

José Laurencio Silva

Nació en Tinaco, Estado Cojedes, el 7 de septiembre de 1791. Hijo de un pescador del tinaco, José Demacio Silva y María Casilda Flores, la comadrona del pueblo. Nuestro héroe no necesitó nunca de blasones y apellidos para remontarse a la cumbre de la gloria y llegar al último peldaño del ejército. Fue un militar venezolano de destacada participación en las guerras de independencia hispanoamericanas. General en jefe del Ejército de Venezuela en la Guerra de Independencia y los años subsiguientes.

En total participó en 17 batallas y combates menores, durante la gesta emancipadora. Fueron sus padres José Dalmacio Silva y María Casilda Flores. En 1810 se enrola en la batallón núm. 9 del Tinaco, con el empleo de subteniente de milicias. Ese mismo, bajo las órdenes del brigadier Francisco Rodríguez del Toro, participa en la Campaña de Coro. Terminada esta campaña, Silva queda en guarnición, entre Baragua y Siquisique. En 1811, con el general Francisco de Miranda tomar parte en las acciones para reducir la disidencia realista de Valencia.

Tras la pérdida de la Primera República, Silva se tiene que ocultar en los bosques de Guárico y Cojedes, donde lleva a cabo actividades de guerrillas. En 1813, cuando Simón Bolívar pasa por San Carlos], decide unirse al Ejército Libertador con un escuadrón de caballería. El 31 de julio de 1813 combate en la batalla de Taguanes.

Entre ese año y 1814 participa en casi todas las acciones tácticas libradas en ese lapso. Prisionero en 1814, escapa y desarrolla actividades guerrilleras en los llanos de Cojedes. Por este tiempo se une al general José Antonio Páez en el Apure y toma parte en hechos de armas que acontecen en aquel teatro de operaciones; así como en los que se llevan a cabo en la Campaña del Centro (1818). Después de la batalla de Calabozo (12.2.1818) es ascendido a teniente coronel. En 1819 actúa en la Campaña de Apure y allí permanece al lado de Páez mientras Bolívar desarrolla su ofensiva sobre Nueva Granada. En 1821 recibe el despacho de coronel después de su actuación en la Campaña de Carabobo. Con Bolívar marcha ese año al sur y combate en la batalla de Bomboná el 7 de abril de 1822. Luego de un año en Guayaquil y Quito sigue con Bolívar hacia Perú donde toma parte en la campaña libertadora. El 6 de septiembre de 1824 combate en Junín y el 9 de diciembre de 1824 en Ayacucho. En esta acción recibió 3 lanzazos, por lo que fue ascendido a general de brigada. Luego de esto regresa a Venezuela, donde en 1827 contrae matrimonio con Felicia Bolívar Tinoco, hija de Juan Vicente Bolívar Palacios. En ese mismo año fue destinado a la Comandancia General de Guayana. En 1829 fue ascendido a general de división, y en 1830 Bolívar lo nombró en Santa Marta como uno de sus albaceas testamentarios y fideicomisarios.

Regresa a Venezuela en 1831 y está activo durante la Revolución de las Reformas. A pesar de que ya estaba retirado de la vida pública, tiene actuaciones aisladas en 1846 contra Ezequiel Zamora y contra el general José Antonio Páez en 1848. El 16 de diciembre de 1851 recibe letras de invalidez. El 7 de marzo de 1855, es ascendido a general en jefe. En 1859, combate a los federalistas en el occidente de Venezuela, y ese mismo año, después de algunos enfrentamientos con Ezequiel Zamora en Barinas y Portuguesa, renuncia al cargo militar que desempeñaba. Luego de esto trabaja en algunos empleos de tipo administrativo hasta que decide retirarse de manera definitiva a la vida privada y se residencia en Valencia. Los últimos años de su vida los pasó en su finca de Chirgua y murió anciano en Valencia, el 27 de Febrero de 1873 a la edad de 82 años. Sus restos fueron sepultados en el Panteón Nacional el 16 de diciembre de 1942.

Joaquín Sinforiano de Jesús Crespo (Joaquin Crespo)

Nació en San Francisco de Cara, estado Aragua, el 22 de agosto de 1841. Murió en La Mata Carmelera, estado Cojedes, el 16 de abril de 1898. Fue un militar y político venezolano, Presidente de la República en dos ocasiones: 1884-1886, y 1892-1898. Inicio su carrera militar muy joven al servicio de los generales Ezequiel Zamora, Juan Crisóstomo Falcón y Antonio Guzmán Blanco durante la Guerra Federal. Luego, bajo el gobierno del mariscal Juan Crisóstomo Falcón, fue Diputado a la Asamblea Legislativa del Estado Guárico (1864), siendo diputado principal por el mismo estado en el Congreso Nacional (1865-1868). Se casa en 1864 con Jacinta Parejo. Al término de su gestión como diputado vuelve a tomar las armas en contra de la Revolución Azul (1868-1870) y se destaca como uno de los principales seguidores del presidente Antonio Guzmán Blanco, quien lo asciende al grado de general en jefe de los Ejércitos de Venezuela (4 de diciembre de 1871). En septiembre de 1876 Crespo formo parte del grupo ministerial del presidente general Francisco Linares Alcántara; fallecido éste el 30 de noviembre de 1878, Crespo se unió al movimiento del general Gregorio Cedeño conocido como Revolución Reinvindicadora la cual repuso nuevamente en 1879 en el poder a Guzmán Blanco, quien ejerció la presidencia durante el periodo llamado El Quinquenio de 1879 a 1884. Durante el Quinquenio guzmancista, fue Jefe Civil y Militar del territorio federal Maracay (1880) y presidente del estado Guzmán Blanco (1882). El 14 de febrero de 1884, Guzmán nombró a Crespo Ministro de Guerra y Marina (actualmente Ministro de la Defensa) y luego fue elegido Senador, para más tarde ser nombrado por el Congreso Presidente de la República para el periodo de 1884-1886, cuando termina si gobierno se lo entrega a Manuel Antonio Diez, hasta llegar Guzman.

El 27 de junio de 1888 el Dr. Juan Pablo Rojas Paúl es elegido nuevo Presidente, acontecimiento que obligó a Crespo residenciarse en las Antillas, desde donde invadió a Venezuela y siendo vencido por el gobierno fue a dar como prisionero a la cárcel de La Rotunda, luego fue indultado por Rojas Paúl con la promesa de retirarse temporalmente de la política y se dedicó a atender su hato El Totumo en Guárico. En febrero de 1892 estalló la Revolución Legalista comandada por Crespo la cual pretendía evitar la continuidad en el poder del presidente Raimundo Andueza Palacios. En octubre de 1892 Crespo entró triunfante en Caracas y tomó el poder.

Con la anuencia y ayuda de Crespo el 1 de febrero de 1897 fue elegido Presidente de la República el general Ignacio Andrade en “elecciones libres” contra la figura del general José Manuel Hernández alias "el Mocho" quien no reconoció el triunfo de Andrade y se alzó en armas con el movimiento denominado el “Grito de Queipa”: "El Mocho" Hernández abandonó Caracas y se internó en los llanos de Cojedes. Crespo, como protector del gobierno, salió a someter al “Mocho” y el 16 de abril de 1898 el general Joaquín Crespo cayó fatalmente muerto por un certero disparo efectuado por un franco tirador identificado como el caudillo venezolano Pedro Pérez Delgado, mejor conocido como Maisanta, líder de la rebelión antigomecista; quien apuntó a un hercúleo personaje montado sobre un caballo alazán peruano de gran alzada, con capa blanca, botas de charol, sombrero de Panamá, en el sitio conocido como La Mata Carmelera. El cadáver de Crespo fue sacado soterradamente hacia Caracas, el enemigo abandonó el campo y se enteró del acontecimiento varios días después. Fue enterrado en un mausoleo en el Cementerio General del Sur, en Caracas, donde reposan sus restos desde el 24 de abril de 1898.

Matías Salazar

Nació en El Pao de San Juan Bautista, Estado Cojedes, en 1828. Murió en Tinaquillo, Estado Cojedes, el 17 de mayo de 1872, fue un jefe militar y político Durante su juventud se destacó por desempeñarse en diversos oficios y actividades: torero, agricultor, albañil, criador de ganado y buhonero. Como torero tuvo cierta trascendencia, ya que incluso se le conoció fuera de Venezuela, siendo su nombra artístico «Matiítas». Cuando tenía 20 años trabajó en Valencia como escribiente del abogado Francisco Paula Quintana (1848); luego en su tierra natal trabajó como maestro de escuela. En 1856, su gran oportunidad al ingresar a la milicia, donde pronto ascendió al grado de subteniente, del cual pasó tras los sucesos de la Revolución de Marzo de 1858, al de capitán. En 1859, año del inicio de la Guerra Federal, se unió a las filas federalistas, erigiéndose enseguida como caudillo de la región central, sobre todo en las provincias de Carabobo y Cojedes. Durante el desarrollo de la Guerra Federal siempre figuró y luchó al lado de personajes como Juan Crisóstomo Falcón y Antonio Guzmán Blanco. Su influencia en los líderes de la Federación quedó demostrada cuando Falcón le perdonó delitos cometidos contra la propiedad, como el asalto contra el comerciante Juan Palau, en el camino de Valencia a Tinaquillo, acción que le valió el remoquete de «El Encarbonado», debido al disfraz que utilizó para cometerlo. En 1862, es ascendido por Falcón al grado de general y se le pone al mando de una brigada de 300 hombres, bajo las órdenes del general Jesús María Lugo, entonces jefe y director de operaciones militares en Carabobo. Al promulgarse la Constitución de 1864, al territorio se le confirma su condición de estado federal; no obstante, esta región se encontraba convulsionada desde 1856 por luchas internas, que fueron aprovechadas por los políticos periodistas de Valencia para preparar su anexión al Estado Carabobo. Así en diciembre de 1865, Cojedes vio como sus legisladores decretaban su desaparición como estado federal y la consiguiente anexión de sus pueblos y territorios al estado Carabobo, acto que se concretó el 1 de enero de 1866, cuando los diputados cojedeños viajaron a Valencia a rendir informes ante la Asamblea Legislativa y demás poderes del estado Carabobo. En 1866, Matías Salazar es elegido como diputado, pero al asumir Hermógenes López el gobierno de estado Carabobo, toma las armas contra él y el 20 de enero lo derrota en Mucaraparo, entrando victoriosamente a Valencia y desplazándose posteriormente hacia El Baúl, donde proclama la paz, para luego retornar a Valencia a ocupar su sitio en la legislatura de Carabobo.

Fernando Figueredo Mena

Coronel de caballería de la Independencia, nació en la Villa de San Carlos de Austria, un día 29 de abril del año 1788, era el segundo de un total de siete hijos procreados por Don Ignacio Figueredo Segundes en su matrimonio con Doña Ana Josefa Mena. Fue bautizado el 2 de Mayo del mismo año en el Templo de la Concepción en su ciudad natal, le pusieron por nombre Pedro Joseph Figueredo el cual por razones aun desconocidas cambio años más tarde, adoptando el nombre de Fernando, con el cual se le conoce en las páginas de la historia. Ingresó en el Ejército patriota en 1810, según la tradición lo hizo ya con el grado de capitán. Hizo la Campaña de Coro, con el marqués de Toro.

Fue preso en la derrota de Araure, sufrida por el coronel Florencio Palacios a manos del capitán Francisco Mármol, el 18 de abril de 1812; de allí fue remitido a Coro y luego a Puerto Cabello, donde permaneció cerca de 7 meses. A este castillo llevaron también a su tío Pedro José Figueredo Gegundes, en octubre del mismo año, por haberse expresado contra la Corona, a la que servía. Fernando Figueredo se une a la Campaña Admirable en 1813 y toma parte en el combate de Taguanes; en 1814 está bajo el mando del general Rafael Urdaneta; con él defiende a San Carlos contra el jefe realista Sebastián de la Calzada (marzo 1814) y luego a Valencia. Con el mismo Urdaneta va en la retirada hacia la Nueva Granada; pasa a Casanare, donde se organiza la resistencia, allí figura como segundo del comandante Francisco Olmedilla, a quien sustituye cuando éste abandona el mando de sus tropas, hasta que José Antonio Páez lo desplaza del mando; no obstante, Figueredo prosigue con éste y participa en todas sus campañas. Luego pasa a unirse a los generales Manuel Piar y Manuel Cedeño en el oriente del país, y con ellos hace la Campaña de Guayana. En 1818, a las órdenes de Simón Bolívar, hace la Campaña del centro contra Pablo Morillo; en este año, se halla en la derrota que el realista Francisco Tomás Morales da a Cedeño, en la laguna de Los Patos (20 mayo), donde perece su hermano el capitán Miguel Faustino Figueredo Mena. Vuelve con Páez en 1819 y participa en numerosos combates: Hatos Marrereños, Queseras del Medio, entre otros. De nuevo a las órdenes de Bolívar, está en la batalla de Boyacá (7.8.1819), donde pierde a su otro hermano el teniente José María Figueredo Mena. En 1821, participa en la batalla de Carabobo. Después, se le designa comandante de armas de San Carlos, hasta 1824, cuando pasa al mismo destino en la provincia de Carabobo, cargo al que renuncia en 1826, ante los sucesos de La Cosiata.

En este año pide su baja por motivos familiares. En 1827 se le concede licencia temporal como coronel de caballería vivo y efectivo. Se dedica luego al comercio y la ganadería al año siguiente se casa en San Carlos con María Guardiana Ramona de la Trinidad Herrera Valdés. Sus restos reposan en el Panteón Nacional desde el 29 de junio de 1937. Dos años después de haber contraído matrimonio, Figueredo pide la baja y se retira en Agosto de 1830, casualmente pocos meses antes de la muerte del Libertador; luego da algunos pasos en la arena política del país participando como Representante en el Congreso Constituyente de Valencia en 1830 – 31.

Quizás los momentos más duros de su vida los tuvo a mediados de 1839 en el mes de junio tuvo lugar un grave problema entre Fernando y su esposa, el cual ocasiona fuertes enfrentamientos entre los Figueredo y los Herrera. Al comienzo de los hechos había ocurrido un lamentable percance donde resulto herido el comerciante español Ramón Goiticoa, ello produce el encarcelamiento del Coronel Figueredo a lo largo de 3 meses y le concede la libertad el 27 de marzo de 1840, sin embargo le establece como condición, entre otras cosas, el destierro de su lar nativo, al cual no podrá volver a entrar jamás. Parte el 12 de Abril hacia su Hato en Barinas llegando el día 14 y a partir de ese momento buscando el olvido se entregó de lleno a las actividades agropecuarias. Aquí en este lugar de condiciones inhóspitas, donde proliferan las enfermedades tropicales, en auto-confinamiento el héroe permanece ajeno al resto del mundo, rumiando su sufrimiento en eternas horas de soledad, hasta que al cabo de un año de aislamiento, diezmado por el dolor del destierro y víctima de una fuerte disentería entrega su alma al creador, el 26 de abril de 1841, a escasos tres días para cumplir 51 años. Sus restos reposan en el Panteón Nacional desde el 29 de junio de 1937.

Mauricio Pérez Lazo

Nació en Tinaco estado Cojedes el 22 de septiembre de 1842, y murió en San Carlos en 1937. Su madre, Dolores de Pérez Lazo, y su hermana Lucrecia Pérez Lazo, fueron meritorias preceptoras en Tinaco y San Carlos. Durante su vida desempeñó multitud de cargos en la administración pública de Tinaco, San Carlos y Guanare. Fue funcionario judicial, Concejal, Legislador, Secretario General de Gobierno. En diversas oportunidades fue Presidente de la Asamblea Legislativa, como se le ve en la primera constituyente del Estado Cojedes en 1909; y llegó a ocupar interinamente la Presidencia del Estado, durante la administración de Arcay, entre 1915 y 1924. Ocupa la Residencia de la Corte Suprema de Justicia de San Carlos. Entre sus poemas más destacados se hallan algunos sonetos y la oda titulada: “Las siete palabras”, dedicada a su madre y reeditada multitud de veces por su alto contenido religioso. Este poema aparece en su libro Crepúsculos. Otro de sus poemas es “El 23 de Mayo” publicado en El Sol de los Llanos. Su hija María Dolores Pérez-Lazo murió prematuramente en la cena del 5 de julio de 1906 realizada en San Carlos. Creemos que Mauricio Pérez Lazo es un poeta poco conocido en Venezuela, por las circunstancias en que publicó su obra, precisamente en momentos iniciales del modernismo. Todos en Cojedes, lo recordamos como el poeta por antonomasia, ya que fue el autor de la letra de nuestro Himno Regional cuya música fue compuesta por Miguel Ángel Granado. Y reconocido como tal en 1910.

José Carrillo Moreno

Nace en Tinaco el 4 de Marzo de 1922, sus padres fueron Telésforo Carrillo y María Moreno Villegas. Cursó sus primeros estudios en una escuela de su lar nativo que regentaba su tío Don Francisco María Arias, con el fin de continuar sus estudios se traslada a la ciudad de San Carlos; Luego los prosigue en el colegio Don Bosco de Valencia, y posteriormente en el liceo Pedro Gual de la misma ciudad, llegando de esta manera a obtener el título de bachiller en el liceo de aplicación anexo el Instituto pedagógico Nacional y de inmediato ingresa a la U. C. V. para cursar las carreras de derecho y periodismo donde obtiene el título de Doctor de Ciencias Políticas y Sociales en 1950.

Carrillo Moreno se dedicó con gran pasión al enaltecimiento del Estado Cojedes, en todo momento sintió un profundo amor a las letras, que se inició en su adolescencia y que se pone de manifiesto por su colaboración en los de la región como: Lampos Tinaqueros, senderos, Juan Bimba, Cultura y Revista de Cojedes, además de esto, publicó un gran número de Obras en las cuales se destacan: Profecías, Huellas de Bolívar en tierras de Cojedes, Matías Salazar, Caracas la Libertadora, Perfil Histórico y Económico del estado Cojedes, Carujo, Biografía de la blanquera, Bolívar desde Cojedes hasta Carabobo y José Laurencio Silva paradigma de la Libertad. Dejó de existir físicamente el 5 de Abril de 1976 en la ciudad de Caracas, desde donde fueron trasladados sus restos para ser sepultados en la ciudad que orgullosamente lo vio nacer,"Tinaco".

Dr. Regulo Arias Moreno

Nació en Tinaco el 18 de marzo del año 1934 hijo del ilustre Tinaquero Don Francisco María Arias. Fue Abogado, político y poeta. Siendo un joven estudiante de bachillerato publicó muchas obras y tuvo una gran importancia en la región. Siempre fue un hombre aficionado a las letras, a pesar de llevar una vida metida en la política en la cual figuró dejando a Tinaco muy en alto en varias ocasiones tanto en la representación nacional y hasta en su propio estado, ya que fue diputado del Congreso Nacional y de la Asamblea Legislativa en multitud de veces. Se caracterizó por ser una persona amable, cariñosa y simpática, y por ese motivo sus amigos sentían un gran gusto por él y lo consideraban mucho. Algo digno de recordar es que tuvo la voluntad de representar a su estado en actos tan importantes a nivel político. La muerte lo sorprende cuando viajaba de Tinaco a Caracas el día 30 de Octubre de 1990, a sus 56 años de edad. La cual causo un gran dolor en los que lo conocían.

Pedro J. Duarte

Poeta Tinaquero, dejó distinguida familia. Fue colaborador de Lampos Tinaqueros, y de otros periódicos como: Ecos de Cojedes (1942) y en La Idea. En 1940 mereció un Accésit, en un concurso literario, mención poesía, promovido en San Carlos. Represento en Cojedes, una tendencia lírica, de rezagado romanticismo, como a la manera de Andrés Mata. En su estilo se pueden observar huellas de otros autores nacionales. Su obra: -Fluoración. Poema. Caracas. Empresa Editorial Buxó, Hnos. (sin fecha de Edición). Su familia conserva el único ejemplar que queda de este opúsculo.

Leopoldo Lima Blanco

Nacido en Tinaco el 16 de Septiembre de 1868. Sus padres fueron Benito Lima y Doña Bárbara Blanco. Sus primeros estudios los realizó en su ciudad natal. Eligió la sagrada carrera del Sacerdocio en la ciudad de Calabozo hasta el año 1890 en el que recibiera la ordenanza sacerdotal de manos de Mons. Felipe Neri Sendra. En 1891 obtuvo el grado de Dr. en Teología en la Universidad Central de Venezuela. Se distinguió por ser un excelente orador participó en grandes misas y en la cual participaba. El Dr. Eloy G Gonzáles lo cataloga como “El Primer Orador Sagrado de Venezuela”. Su gente lo apreciaba mucho y se destacó mucho en el pueblo del Macapo en el cual después de un tiempo en su honor lo decretan como Municipio Lima Blanco.

José Antonio Caballero Malpíca

Nace en Tinaco, el 10 de Enero de 1878. Sus padres fueron: el Dr: Miguel Caballero Herrera y Doña Carmen Malpíca Núñez. Formado en un hogar bajo rígidas disciplinas al lado de sus hermanos, el Dr. Manuel Jacinto Caballero Malpíca, ilustre levísta, antropólogo e historiador, y Miguel Caballero Malpíca, escritor y académico de la historia. Aun cuando su padre era médico, siente desde muy joven inclinación hacia la abogacía, carrera que escoge al concluir sus estudios de secundaria en la universidad de Valencia en el año 1894. Llega a Caracas para inscribirse en la Ilustre Universidad Central, donde con vocación y perseverancia inicia y concluye su anhelada carrera, recibiendo de manos del sabio Dr. Santos Dominicí, el título de Dr. en Ciencias Políticas y Sociales, el 17 de Diciembre de 1.900. Contrae matrimonio con la señorita Mercedes Ashdown Delgado y luego se dedica al ejercicio de su profesión en la ciudad de Caracas. En el año de 1925, viaja a Europa con el propósito de conocer sus grandes Capitales. Estando de nuevo en su país desempeñó por mucho tiempo la fiscalía del Ministerio Público del Distrito Federal. Caballero Malpíca fue colaborador de importantes periódicos capitalinos, como: “El Gráfico”, “La Religión”, “La Esfera” y “El Universal”. Ignoramos la fecha de su muerte pero sabemos que se le ha tributado justo reconocimiento a su memoria.

Estefana González

Nace en Tinaco, el 5 de Abril de 1866. Sus padres fueron el General Luis María Gonzáles, caudillo de la revolución federal y Doña Francisca Villegas. Cursa sus primeros estudios en la Escuela de Niñas de Tinaco. Inicia sus labores docentes en la Escuela Municipal de la población de El Baúl y posteriormente en Tinaco y San Carlos, manteniéndose en esta noble profesión durante más de 30 años. En 1914 se inicia se inicia en Tinaco la circulación del vocero "Sol de Diciembre" fundado y dirigido por ella, el cual circuló por poco tiempo. En 1914, funda en El Baúl el periódico "La Idea", este circuló hasta 1928, a partir de ese año continúa en Tinaco, luego en San Carlos y por último en Tinaco hasta 1950. Su reproducción se inicia en la imprenta de Francisco María Arias. Figuró entre los baluartes que fundó el grupo literario "Llanura" de Tinaco. Estefana Gonzáles publicó una novela titulada "Genoveva" y un ensayo con el nombre "El Sol de Cojedes", en el que incluye una recopilación cultural con notables y famosos escritores de América. Sus amplios servicios prestados en pro del desarrollo cultural, a través de las labores docentes, literarias y periodísticas desde temprana edad le hacen consagrar como la "Primera Mujer, Poeta y Periodista" en el Estado Cojedes. Dentro de los homenajes hechos en su memoria tenemos el escenario de la Escuela "Francisco María Arias" en su lugar nativo, y un instituto educacional en la población de Las Vegas, del municipio Rómulo Gallegos la cual lleva su nombre. Esta insigne mujer muere el 25 de Enero de 1952 en Tinaco.

Monseñor Sixto Sosa Díaz

Nació en Tinaco, Estado Cojedes el 20 de Octubre de 1870. Estudió sus primeras letras en su ciudad natal y en 1881 fue llevado a Trinidad para culminar sus estudios. En 1887 ingresa al "Seminario Josefino de Calabozo". Fue ordenado sacerdote el 22 de Diciembre de 1894 en la Catedral de Calabozo. El 17 de Febrero de 1903 llega a Altagracia de Orituco en calidad de párroco y emprende allí una fecunda labor que cautiva la atención de sus superiores. En Mayo de 1914 fue nombrado Administrador Apostólico de Guayana y consagrado Obispo de Titular de Claudiópolis el 31 de Octubre de 1915 y en 1923 toma posesión de la nueva Diócesis de Cumaná, diócesis que regirá durante 20 años hasta su muerte acaecida en Caracas el 29 de Mayo de 1943. Fue Monseñor Sixto Sosa un auténtico hijo de los llanos venezolanos, de contextura recia, temple firme y rostro sonreído.

Era austero y con ánimo emprendedor que le hacía apto para la ardua misión que le confió la Providencia. Era un "hombre de Dios". Todo lo refería a Dios, quien era inspirador o móvil último de sus actos. Sus trabajos apostólicos, tanto en Altagracia como después en la dilatada diócesis de Guayana, son un testimonio vivo de su total entrega al servicio de Dios y en bien de los demás. Fue el amor hacia los demás que le impulsó a promover tantas obras en bien de la humanidad: hospitales, ancianatos, colegios y, para asegurar la continuidad de estas obras, fundó la Congregación. Las obras que promovió y en las que invirtió sus haberes, hablan de su profunda caridad encarnada en las necesidades del medio en que le tocó vivir. Actualmente en su ciudad natal Tinaco existe un Colegio que tiene varios años de prospera labor, con el nombre de tan ilustre hijo de Tinaco y el Estado Cojedes.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Patrimonio Histórico Cultural, Estado Carabobo

Mitos y Leyendas del Estado Anzoátegui Venezuela

Patrimonio Histórico Cultural, Estado Aragua